Sobre la tierra: Cielo ¿te riño mucho, soy muy duro contigo? No… bueno, no sé… papá, yo que sé, es tú vida, lo tienes que decidir tú porque tú mandas en tu vida y yo en la mía.
Sobre el aire: ¡Dibuja algo en el aire y lo tengo que adivinar yo! Hago un círculo grande con mi dedo índice y muchas líneas saliendo de él ¡Es un sol, mamá, es un sol! Ahora yo. Hace un gesto con la mano que no interpreto de ninguna manera. Me quedo un rato pensando, le pido que me lo repita. Me rindo. Mamá, con lo fácil que era… ¡Una cadena de ADN! Qué despiste. Sí.
Agua: ¿El agua flota?
Fuego: le cuenta una cosa a Yola y le asegura que pasó de verdad. Ella le dice que es una bonita historia, pero que no cree que sea cierta. Iván responde, siempre responde. Vamos a ver, esa historia ha salido de mi cabeza y está en mi cabeza ¿tú ves mi cabeza? mi cabeza existe ¿no? pues entonces la historia también.
Recopila todas las anécdotas que puedas (y haz un libro para disfrute propio y futuro), luego serán (más) preciosas
Cómo puede no haber comentarios!!!!… Ah… Claro… es que no hay nada que decir.
Me muero cada vez que Iván respira.
Qué profundo y espabilao para su edad ¿no?, a ver si te ha salido un niño índigo de esos de la new age jeje