
Recuerdo que cuando vivía en EEUU conocí a un chico afgano que me contó algo muy curioso. Tenía aproximadamente mi edad (algo más joven) de manera que la época más radical de los talibanes le pilló en plena adolescencia. Me dijo que durante esa época su sueño era salir del país, quería estudiar fuera, estaba harto de que no me dejasen afeitarme y de no poder llevar la ropa que a mí me gustaba, era casi un niño, un niño muy rebelde. Me quedé sorprendida ante tal afirmación, nunca me imaginé que las leyes talibanas fueran prohibicionistas también con la indumentaria masculina. Además este chico me contó que antes de llegar a EEUU las únicas mujere

Lo que más me sorprende de esta historia es que nunca se escuche hablar de las represiones masculinas de los sistemas heteropatriarcales. Es como si se pensase que de quien hay que preocuparse es de las mujeres que son las que no saben decidir por sí mismas. No tengo noticias de ningún chico musulmán expulsado de su centro de estudios (universidad o instituto) por llevar barba a pesar de que es una costumbre tan extendida entre los musulmanes como el hijab.
Y es que ellos son machotes, saben lo que quieren.
Y ni se te ocurra llorar machote… porque… no lo vas a hacer, verdad?? Claro que no!! eso es un hombre!!!
Con lo que me gustan a mí los hombres llorando a moco tendido viendo Bambi.
Justo hoy pensaba algo así, en la cantidad de víctimas masculinas que deja el sistema machista por el camino.