
No es justo que yo deba esperar lo que me toque esperar para darme cuenta de que realmente ya no estás. Cada una de las veces que tomo el teléfono para llamarte, cada una de las fotos que le hago a Iván para mandarte, cada vestido que sigo comprándome a tu gusto, para que me veas arregladita, son raquetazos al aire que asimilo tranquila porque hoy hace ya casi dos semanas y eso parece que no es suficiente. Llegó tu hora y yo no sé si llegará con ella otra hora, la hora de mi horror. La espero tranquila y esperanzada, haciendo mis cosas y mirando por la ventana, por si la veo llegar. Deseo tanto que esa hora me abrace por fin, poder llorarte, poder despedirme de ti, entender de una vez por todas qué coño es lo que significa esa frase que me repiten todos últimamente a cada momento: siento lo de tu abuela.
Veo que eres una completa actriz
Espero que lo digas porque has visitado el perfil, porque en esta enrada no hay nada fingido.
Bienvenido.
oye, quien se te ha muerto? tu marido?
Estaría bien que, ya que haces una pregunta tan personal, al menos firmases el mensaje. También estaría bien que, ya que comentas un post, al menos te lo termines de leer.
Este post, que escribí con el alma hecha pedazos, es el que ha tenido las repuestas más insensibles y fuera de lugar de todos los que he escrito en tres años como bloguera.
Alicia, una más que te sigue…Me encanta como escribes…Besos
Muchas gracias María José ¿Cómo has sabido que tenía un blog?
Besos.